¡Hola a tod@s! Como cada semana aquí tenéis una nueva entrada semanal. Para esta semana he decidido hablar sobre la gestación subrogada. La gestación subrogada, maternidad subrogada, gestación por sustitución, vientre de alquiler o subrogación es la práctica por la que una mujer acepta quedarse embarazada, llevar la gestación a término y dar a luz a un niño, todo ello para otra persona o pareja, las cuales son o se convierten en progenitores del niñ@, en otras palabras, es cuando un mujer carga con el embarazo y da a luz a un bebé que le pertenece a otros padres genéticamente y legalmente.
Existen diversos tipos de maternidad subrogada:
1. Según la genética del bebé:
- Tradicional. La madre gestacional aporta también su óvulo, ero el espermatozoide proviene del padre que solicita la subrogación.
- Gestacional. Cuando el óvulo y el espermatozoide son aportados por la pareja que solicita la subrogación.
2. Según las financias de por medio:
- Altruista. Cuando la mujer que lleva el embarazo lo hace sin ánimo de lucro, es decir, no obtiene remuneración o pago por sus servicios. Los padres biológicos suelen responsabilizarse de todos los gastos.
- Lucrativa. cuando la madre gestacional ofrece llevar el embarazo a cambio de una suma de dinero.
La práctica de la gestación subrogada es un desprecio a la dignidad de la mujer al producirse un mercado con ella, puesto que el cuerpo de una mujer se convierte en un simple objeto. Además:
- Se mercantiliza con el deseo de ser padres.
- No se puede garantizar el derecho de la madre gestante a no sufrir las consecuencias psicológicas de un aborto.
- Problemas anímicos de la madre gestante después de nueve meses de gestación y tener que desprenderse del bebé.
- El niño se convierte así en objeto, pues se mercantiliza con él, es decir, tiene un precio.
La gestación subrogada arrebata el derecho a decidir durante el embarazo y la posterior crianza, cuidado y educación del bebé. Un embarazo así no es una técnica de reproducción asistida, puesto que se produce un control sexual de la mujer y la mercantilización de las mismas. Esta práctica se inscribe dentro del tipo que implican el control sexual de las mujeres. Alquilar el vientre de una mujer no se puede catalogar como "técnica de reproducción humana asistida". Las mujeres no somos máquinas reproductoras que fabrican hijos en interés de los criadores. El "altruismo y la generosidad" de unas pocas mujeres, no evita la mercantilización, el tráfico y las granjas de mujeres comprándose embarazos a la carta.
Es cierto que algunas mujeres recurren a la gestación subrogada por su tremendo deseos de ser madres, y que por los motivos que sean no pueden tenerlos ellas mismas, pero esto no es excusa. Son muchos los niños que actualmente están tutelados por el estado, a la espera de una familia que los adopte, pero la mayor parte de la sociedad es tan egoísta que prefiere pagar por tener un hijo suyo propio, en lugar de ayudar a un pobre niño al que sus padres no podían darle un hogar.